Creen que la magistrada usa su poder para obstaculizar el proceso judicial contra el conductor
Santo Domingo Este.- El joven que atropelló brutalmente a tres personas en la Ciudad Juan Bosch, de las cuales una falleció, es hijo de la jueza Mary Berenita Ramírez Jiménez, del Cuarto Juzgado de la Instrucción de Santo Domingo.
El vehículo, todavía con placa de exhibición y que está retenido por las autoridades, está a su nombre. Se trata de una yipeta marca Mazda, modelo CX9, del año 2024.
La acusan de usar su poder
Los parientes de las víctimas la acusan de usar su poder para entorpecer sus acciones, al punto de que se les habría negado hacer la declaración de tránsito ante la Dirección General de Seguridad y Tránsito Terrestre (Digesett).
Aseguran que el joven está en libertad y lo imputan de haber actuado con premeditación con el propósito de hacer daño, aunque no explican si entre ellos había algún conflicto previo. Tanto el joven como los accidentados viven en la Ciudad Juan Bosch.
Aunque se ha dicho que se trata de un menor de 17 años de edad, la familia de los afectados dicen que no lo han visto ni éste ha sido presentado ante las autoridades.
En la declaración jurada de bienes de la magistrada Ramírez Jiménez figura un hijo que nació en el 2006, por lo que en enero cumplió la mayoría de edad, y otro que nació en diciembre del 2008, y cumple 16 años en diciembre.
«Esto fue un crimen. Si ustedes ven los videos se pueden dar cuenta de que esto fue un asesinato contra mi familia. Querían acabar con toda mi familia, no sé cuáles eran las intenciones», señala Alfredo Trinidad, hermano de la fallecida.
En los videos que grabaron las cámaras de vigilancia de la plaza se puede ver cómo el conductor entró y salió varias veces del estacionamiento. Luego permaneció varios minutos aparcado, hasta que las dos mujeres y los menores se dispusieron a salir.
En ese momento, el vehículo fue conducido a la salida y, justo cuando los peatones empezaron a cruzar la calle, aceleró en vía contraria, despedazando a sus víctimas bajo las llantas.
Altagracia Trinidad fue sepultada ayer sábado en Constanza, mientras que Eulalia Trinidad, su hermana, está ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Traumatológico Doctor Darío Contreras, con un brazo roto y traumas en el cráneo.
También está hospitalizada en cuidados intensivos del Hospital Pediátrico Doctor Hugo Mendoza una adolescente de 14 años de edad con un trauma cráneoencefálico severo, en ventilación mecánica.
«No me percaté»
La tragedia ocurrió el jueves alrededor de las 10:00 de la noche y el joven acudió junto a su padre, Víctor Manuel Hernández, a hacer la declaración de tránsito al día siguiente a las 5:25 de la tarde.
En el acta de su testimonio se puede leer lo siguiente: «Atropellé a las señoras (los nombres de las víctimas) ya que iban cruzando y no me percaté».
El abogado de la familia, Hanfiel Polanco, afirma que «el menor fue encargado a un militar, como parte de los protocolos que se utilizan en estos casos a los fines de que pueda ser llamado en cualquier momento».
«Sin embargo, el menor no ha sido presentado en ninguna de las instancias. El acta de tránsito ni siquiera fue firmada por los padres, sino por un abogado que ellos buscaron para esos fines», afirma.
Se queja de que las autoridades no les han querido entregar documentos ni pruebas y no saben si los pasajeros que iban a bordo han sido interrogados.
«Entendemos que aquí, fuera de lo que pueda ser un accidente, hay otras connotaciones penales, por las condiciones en que se dieron los hechos. Ustedes han sido observadores de varios videos donde se ven a estos sujetos de manera muy planificada: ida, vuelta, esperar que crucen para acelerar…», conjetura el togado.
Este lunes, en la mañana, van a interponer una denuncia ante el Tribunal de Tránsito de Santo Domingo Este y depositarán en el Consejo del Poder Judicial una solicitud para investigar a la referida jueza.
Dificultades para declarar
El abogado Polanco contó a Diario Libre que el viernes se presentaron en la Digesset y allí les pidieron pruebas de que las dos personas que estaban hospitalizadas fueron ingresadas por un accidente de tránsito.
Luego, la Digesset de Santo Domingo Este les habría solicitado el acta de nacimiento de la fallecida, pero no la aceptaban porque no existían pruebas de afiliación de hermanos entre el declarante, Alfredo Trinidad, y la muerta.
Tuvieron que ir a una oficialía de la Junta Central Electoral (JCE) para obtenerlas.
«Después de varias llamadas, nos autorizaron hacer la denuncia. Sin embargo, tenían órdenes del Ministerio Público de que no podían recibir la denuncia en Santo Domingo Este por el supuesto de que esa persona ya se había presentado», asegura el abogado.
Luego se dirigieron al Centro del Automovilista, donde le informan que tenían que esperar una magistrada fiscalizadora, pero ella no estaba porque era sábado en la noche.
Finalmente pudieron hacer su declaración de tránsito el sábado alrededor de las 8:00 de la noche.